En cada pequeño rostro que mira al cielo con esperanza, hay una historia de lucha, de hambre y de sueños dormidos. Pero también hay una luz: la luz del amor que nace cuando alguien como tú decide extender su mano y cambiar vidas. No solo les damos alimento, sino que sembramos fe, abrazamos sus lágrimas y construimos un futuro donde cada niño pueda sonreír sin miedo. Tú puedes ser ese milagro, esa fuerza que transforma el dolor en alegría, y la tristeza en esperanza. Porque cuando ayudamos a un niño, estamos alimentando el alma del mundo.
Dios y Familia es mucho más que una organización; somos un llamado del cielo hecho misión en la tierra. Nacimos del deseo ardiente de servir, de extender la mano a quienes más lo necesitan, y de reflejar el amor incondicional de Jesucristo en cada acto de compasión.
En un mundo donde millones de niños y familias viven olvidados por la indiferencia, nosotros creemos en el poder del abrazo, en la fuerza de una oración, y en el milagro que ocurre cuando una necesidad es atendida con fe y ternura.
🌱 ¿Qué hacemos? Alimentamos cuerpos, sí, pero también corazones. Brindamos apoyo material, acompañamiento espiritual y esperanza a niños y familias en extrema pobreza, sin importar su origen.
🤍 ¿Por qué lo hacemos? Porque hemos sido llamados a ser luz en medio de la oscuridad, a levantar al caído, a consolar al que llora, y a recordarles a todos que no están solos: Dios camina con ellos… y nosotros también.
🕊️ En cada sonrisa recuperada, en cada plato de comida servido, en cada niño que vuelve a soñar, está la prueba viva de que el amor de Dios se manifiesta a través de los que creen, sirven y actúan.
Dios y Familia es un puente entre el cielo y la tierra. Entre quienes tienen el corazón dispuesto a dar… y aquellos que anhelan un poco de esperanza.
En nuestra ONG Dios y Familia creemos que cada niño es un regalo de Dios y merece crecer en un entorno lleno de amor, fe y dignidad, soñamos con una sociedad guiada por los valores del Evangelio, donde las manos solidarias restauren vidas y construyan familias fuertes en el amor de Cristo. Nuestra visión es ser instrumentos del Señor para llevar esperanza donde hoy hay dolor, comenzando con los más pequeños, pero extendiendo nuestra misión a cada persona que necesite sentir que no está sola. Con Dios como guía y la familia como base, trabajamos para sembrar luz donde hay oscuridad… y tú puedes ser parte de ese milagro.
“En ONG Dios y Familia, trabajamos con amor y fe para proteger, acompañar y transformar la vida de niños en situación de vulnerabilidad, brindándoles apoyo espiritual, emocional y material. Nuestra misión es ser una extensión del amor de Dios en la tierra, sembrando esperanza en los corazones más pequeños y edificando familias fuertes y unidas como base de una sociedad más justa. Con una mirada puesta en Cristo, empezamos con los niños, pero avanzamos firmemente hacia el servicio a toda persona que necesite sentir que no está sola. Porque donde hay fe y familia, hay futuro.”
FUNDADORES:
Fundador / Presidente y Mentor de la ONG “Dios y Familia ”
Mi nombre es César De La Borda Tafur, fundador, presidente y mentor de la ONG Dios y Familia. Mi historia no ha sido fácil, pero ha sido profundamente inspirada. Inspirada por el Altísimo, guiada por la fe, y sostenida por un propósito más grande que yo: los niños, que son el reflejo más puro del cielo en la tierra.
Como dijo nuestro Señor Jesús:
"Dejad que los niños vengan a mí, y no se lo impidáis, porque de los que son como ellos es el Reino de los Cielos." — Mateo 19:14
He vivido una vida de esfuerzo, constancia, sacrificios y caídas. No soy un hombre perfecto, pero sí uno que ha aprendido. He conocido la debilidad, pero también la redención. Y en cada momento difícil, ha sido Dios quien me ha sostenido.
"El Señor es mi pastor, nada me faltará." — Salmo 23:1
He tropezado muchas veces, pero aprendí que nunca se pierde cuando se aprende.
Ese es mi lema:
"Nunca has perdido si no has aprendido."
En los momentos más oscuros, cuando el mundo me daba la espalda, Dios me mostró que aún tenía un propósito. Y hoy ese propósito es claro: servir a los más pequeños, formar familias fuertes, y levantar vidas con amor, fe y dirección.
Desde esa convicción nació esta ONG. No somos solo una organización, somos una misión viva, una familia en nombre de Dios. Sabemos que cuando Dios guía, nada detiene. Y por eso te decimos hoy:
Únete a nuestra misión. Sé parte de este propósito trascendental. Ayúdanos a ayudar.
"Porque todo lo que hiciste por uno de estos pequeños, a mí me lo hiciste." — Mateo 25:40
Con humildad y con el corazón encendido por la fe, te invito a caminar con nosotros.
Que el Señor los bendiga hoy y siempre.
Amén.
CDLBT
Co-fundador y Vicepresidente de la ONG “Dios y Familia ”
Mi nombre es Amir Yazzid De La Borda Díaz, tengo 19 años y he elegido un camino poco común para mi edad: el del esfuerzo, el sacrificio y el propósito. Soy deportista de artes marciales, subgerente de la empresa que hemos conformado junto a mi padre YAZMAR S.A.C. y cofundador de la ONG Dios y Famlia, un proyecto nacido no de la comodidad, sino del dolor, la caída y la voluntad de no rendirme jamás.
Desde muy joven me enfrenté a momentos de oscuridad, confusión y lucha interna. Me sentí perdido muchas veces, fallé. Pero aprendí que la verdadera claridad no llega en los momentos fáciles, sino en los más difíciles. “El alma se fortalece con la adversidad, como el acero con el fuego.”
Hoy sé que Dios ha sido mi guía. Mi fe me sostiene. Mi amor por ayudar me impulsa. Y aunque busco la excelencia todos los días, reconozco que el único ser perfecto en esta tierra fue Jesucristo, y el único Padre perfecto es Dios.
“No pierdas más tiempo discutiendo sobre lo que debería ser un buen hombre. Sé uno.”
— Marco Aurelio
Esa frase define mi vida. No vine al mundo para quejarme ni para ser espectador. Vine a actuar. A construir. A ser útil. Cada golpe en el tatami me recuerda que la vida también golpea. Pero cada vez que me levanto, sé que no solo entreno mi cuerpo, entreno mi carácter.
Así nació Dios y Familia: para que otros jóvenes, como yo, descubran que su historia no termina en la caída, sino que comienza cuando deciden levantarse. No somos una ONG más. Somos una hermandad de lucha, fe y transformación.
Si algo aprendí en estos 19 años es esto:
"Quien no vive para servir, no sirve para vivir."
Y yo, con cada día que Dios me regala, elijo servir, construir y dejar huella.
Esta es mi historia. Esta es mi misión.
Y esto… apenas comienza.
Amen.
ADLBD